La implantología es un tratamiento dental que requiere cirugía. De ahí que siempre despierte muchas dudas y cierta inseguridad en los pacientes que lo requieren.
Preguntas relacionadas con la anestesia, postoperatorio o tipos de implantes para dientes se hacen a menudo. Pero si hay una pregunta recurrente, esta es en qué consiste una cirugía dental para implantes, es decir, cómo es el proceso quirúrgico para conseguir unos dientes estéticos y fijos.
Para explicarte cómo es la cirugía dental para implantes, debes saber que existen dos tipos de procedimientos: implantes dentales convencionales e implantes dentales inmediatos. La elección de uno u otro la determinará el implantólogo en función al estado en el que se encuentre la boca del paciente.
Implantes dentales tradicionales
Antes de realizar una cirugía dental para implantes convencionales, el dentista realizará al paciente un estudio muy completo a partir de un TAC para evaluar el estado en el que se encuentra la boca.
Una vez que se le ha puesto la anestesia al paciente o la sedación consciente, el implantólogo procederá a realizar una incisión en las encías para dejar al descubierto el hueso en el que se colocará el implante y poder extraer la pieza o piezas dentales.
Los implantes se atornillan sobre el hueso y en los huecos donde falte la pieza dental se usará un componente más para dar lugar a la osteointegración, el proceso por el cual el implante se adhiere al hueso, lo que suele tardar 2 o 3 meses.
La osteointegración garantiza una base sólida y estable para los nuevos dientes.
En aquellos casos de implantes sin hueso dental, es probable que el dentista use algún tratamiento regenerativo para ayudar a la osteointegración y cicatrización de los implantes.
Una vez transcurrido el tiempo de la osteointegración, será posible colocar los dientes. No obstante, a muchos pacientes se les colocan prótesis provisionales antes de colocar los dientes fijos definitivos.
El último paso en un implante de dientes convencional sería la reexposición del implante, o lo que es lo mismo, sacar impresiones de los dientes para que en el laboratorio se hagan las coronas para los implantes. Así, y una vez terminadas estas, podrán colocarse definitivamente los dientes.
Tras un implante convencional el dentista indicará los cuidados a seguir y establecerá la fecha de una serie de revisiones para garantizar el éxito de la cirugía dental.
Implantes dentales en 24 horas
Los implantes dentales en 24 horas, también conocidos como implantes dentales inmediatos o implantes dentales en un día son aquellos que se ponen justo después de haber extraído el diente o los dientes afectados.
Este tipo de implantes solo se realizan cuando el paciente tiene una buena cantidad de hueso dental, lo que facilita la colocación del implante. Si hay suficiente hueso o no para realizar un implante inmediato, lo decidirá el dentista.
Entre las grandes ventajas de unos dientes fijos en 24 horas encontramos que, por supuesto, el número de intervenciones quirúrgicas es menor y que el tratamiento dura muchísimo menos tiempo que una cirugía de implantes dentales convencional.
Al igual que una cirugía dental de implantes convencionales, la implantología inmediata comienza con el estudio y valoración inicial de la boca del paciente. Además de una revisión final para garantizar el éxito del tratamiento dental.
Ahora bien, la cirugía dental para implantes en 24 horas es mucho más breve:
- Anestesia o sedación consciente, en función a las necesidades del paciente.
- Extracción de las piezas dentales.
- Colocación de los implantes de forma precisa.
- Colocación de los dientes provisionales sobre los implantes.
Todo el proceso se lleva a cabo durante el mismo día en la clínica dental y, por lo general, en una sesión de mañana y otra de tarde. Entre una y otra, el paciente puede descansar en la clínica -una sala totalmente preparada para ello- o si lo prefiere, marcharse a su casa y volver a las horas para finalizar el tratamiento.