5 razones por las que debes reemplazar dientes perdidos

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Razones por las que reemplazar dientes perdidos

Si hablamos de reemplazar dientes perdidos, debemos tener presente que los dientes, salvo los de leche, no se caen por causas naturales. Al igual que tampoco se caen cuando envejecemos, sino que “se desgastan”.

De ahí, que no esté considerado como algo normal la pérdida de dientes durante la adolescencia o edad adulta, salvo que exista un traumatismo como un fuerte impacto que haga que se caigan o se rompan.

Así que si de un día para otro perdemos un diente, debemos tener muy claro que se debe a alguna patología concreta que deberá determinar el dentista y la cual estará muy ligada, en la mayoría de los casos, a nuestros hábitos diarios de higiene bucodental.

Factores de riesgo de pérdida dental

Como decíamos, hay patologías que puede desencadenar la pérdida de piezas dentales como ocurre en el caso de la periodontitis, fácil de detectar porque ocasiona inflamación, enrojecimiento y sensibilidad en las encías. También puede ocurrir que enfermedades como la diabetes o el cáncer propicien la caída de dientes.

Del mismo modo, hay otras circunstancias que requieren una implantología dental, como un mal uso de los dientes también puede hacer que se caigan. Es una mala idea usar nuestros dientes para abrir botellas o comernos las uñas, por poner un ejemplo.

El bruxismo también puede ocasionar la pérdida dental, ya que los desgasta muchísimo haciendo necesarios los implantes para dientes. Al igual que tener caries, que es otro de los factores clave para ir perdiendo dientes poco a poco.

A todos estos factores hay que sumar otros como fumar o beber en exceso. Sin olvidar la frecuencia con la que se visita al dentista.

Todavía son muchas personas las que no acuden a una clínica dental para revisión y menos para reemplazar dientes perdidos. Cuando lo hacen es porque un problema bucal se ha hecho más que evidente y sienten dolor o sangran sus encías en exceso.

¿Por qué debes debes reponer los dientes perdidos?

En el caso de dientes perdidos ocurre lo mismo. Por lo general la falta de un diente no ocasiona molestias o incomodidad, así que los pacientes retrasan su visita al especialista o bien directamente no van. Un grave error en ambos casos.

Reemplazar dientes perdidos no es solamente una cuestión estética, sino que es imprescindible para mantener la salud de nuestro cuerpo en general.

Cuando nos falta algún diente y si este no se ve, no le damos importancia.
Por lo general no nos paramos a pensar en las consecuencias negativas que la pérdida dental puede ocasionar. Sin embargo, debes tomar buena nota de ellas, porque son mucho más serias de lo que podías llegar a imaginar.

Pérdida total de los dientes

Cuando se nos ha caído un diente, las probabilidades de que se nos caigan otros son mayores. Esto ocurre porque el resto de dientes comienza a desplazarse para ocupar los espacios que han quedado vacíos y durante el movimiento se produce la pérdida de hueso dental que da lugar a la caída. No obstante, y afortunamente, ya es posible hacer implantes sin hueso dental.

Enfermedades de las encías

Si obviamos la pérdida de un dientes o varios tenemos muchos riesgos de padecer enfermedades de las encías como gingivitis o periodontitis. Tengamos en cuenta que las encías estarán más desprotegidas si no tenemos dientes y los riesgos de contraer enfermedades serán mayores.

Reemplazar dientes perdidos para evitar problemas de corazón

Existen bacterias como la Streptococcus gordonii que pasan directamente de la boca al torrente sanguíneo cuando las encías sufren algún tipo de alteración. Cuando esto ocurre las arterias se ven afectadas y por consiguiente nuestro corazón tiene más probabilidades de sufrir algún tipo de lesión.

Alteraciones en el aparato digestivo

Si nos faltan dientes, no podemos masticar bien y si no masticamos bien, el aparato digestivo realiza sus funciones con mayor trabajo dando lugar a digestiones pesadas, gases o dolores estomacales.

Dolores frecuentes

Si nos falta un diente o varios y no se reemplazan a su debido tiempo, no será extraño padecer dolores de cabeza similares a las migrañas. Nuestra boca está conectada al resto de cuerpo por muy increíble que nos pueda parecer.

También es posible padecer dolores en el cuello e incluso la espalda, tener molestias en los oídos en incluso apreciar un pérdida de visión.

¿A qué esperas entonces para visitar a tu dentista? Reemplazar dientes perdidos debe estar entre tus prioridades. Tu salud puede estar en riesgo.

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